Descubrimos el pasado desconocido de San Antonio de Aco

 


San Antonio de Aco es un centro poblado ubicado a 3,500 metros de altitud en el distrito de Mirgas, provincia de Antonio Raimondi. Bajo su jurisdicción están los caseríos de  San Pedro de Mareypampa, Unión Charpa y San Cristóbal de Corma, que en conjunto suman una población de aproximadamente 800 habitantes.

 

Aunque actualmente forma parte de una zona catalogada como de extrema pobreza, en tiempos pasados fue una próspera hacienda fundada por los españoles. Si bien no se conocen los nombres de los primeros dueños, se sabe que en 1711 el propietario era Bernardo Prudente, un “pardo libre" (negro de padre español) que pasó grandes penurias debido a la ambición de un cura que  tenía  sus  haciendas en diversos pueblos de la entonces doctrina de San Andrés de Llamellín.

 

Este cura, Francisco de la Serna[1],  le quitó  a sus indios y yanaconas para llevárselos a trabajar como esclavos a sus haciendas, donde tenía decenas de telares. Bernardo Prudente también tenía telares, pero no podía competir con el poder y prepotencia del sacerdote que acaparaba toda la mano de obra de la zona.  Ante ello, el hacendado  lo denunció en  el  Arzobispado de Lima, pero lejos de hallar justicia solo le dieron la espalda alegando que un “pardo libre”, es decir, un negro,  no tenía derecho a  querellar a un cura.

 

No existen más datos sobre la época colonial de San Antonio de Aco, pero según el alcalde del pueblo, Clever Mejía, este lugar  fue una  hacienda hasta la década de 1970,  cuando llegó la Reforma Agraria. Su último dueño habría sido Tobías Barrón, sobre quien no hallamos datos exactos.

 

La tradición textilera de la antigua hacienda colonial perduró en San Antonio de Aco hasta la década de 1980, ya que muchas personas continuaron trabajando con telares y callhua, “pero ahora, con la modernidad, ya no queda nadie”, dice el alcalde.

 

Desde el 11 de junio de 1995, San Antonio de Aco ostenta la categoría de Centro Poblado. Siguiendo sus antiguas tradiciones,  el 20 de septiembre de cada año, y durante una semana, la comunidad celebra su fiesta patronal religiosa en honor a San Antonio.

 

Fotografía: Clever Mejía

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[1] Citado en el libro  “Vincocota y Rahuapampa, historia de estas tierras y descubrimiento de su arqueología”, librería del Fondo Editorial del Congreso de la República, 2019. Jr. Huallaga 330, Lima. Teléfono 924 987 288

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